Ausentismo por covid golpea a Toyota: suspenden un turno de producción por falta de personal
El crecimiento de los contagios de coronavirus comienza a complicar a las empresas. La automotriz Toyota decidió suspender el turno tarde de producción por una semana, a partir del lunes, ante el aumento de la cantidad de personal con licencia por estar cursando la enfermedad o por ser contacto estrecho de portadores del virus y tener que aislarse. Si bien los protocolos de la terminal se cumplen de forma eficiente – no hubo contagios internos -, el problema se concentra en el nivel de ausentismo alcanzado en los últimos días por parte de trabajadores que no concurrieron a trabajar por haber comunicado estar enmarcados en uno de los dos los motivos explicados.
Ante esta situación, en la planta de la localidad bonaerense de Zárate se consideró que la falta de personal ponía al límite el funcionamiento de la línea de producción en dos turnos por lo que se decidió concentrar la actividad durante uno, por la mañana, y reservar al personal que trabaja por la tarde como reemplazo. En cada uno de los turnos trabajan unos 2.500 empleados.
El tema de Toyota puede ser la primera consecuencia, con impacto económico, de la segunda ola de la covid-19 en el país y replicarse en otras fábricas, en los próximos días. La marca japonesa es la principal productora de vehículos de la Argentina y eso hace que sufra primero las consecuencias de la pandemia.
De hecho, el lunes pasado, esta automotriz llevó al máximo histórico la capacidad de producción en Zárate para tratar de satisfacer la fuerte demanda de su pickup Hilux y el SUV derivado SW4. Para eso, comenzó a sacar de la línea de montaje una unidad cada 90 segundos, tal como adelantó MDZ. La automotriz decidió imponer ese ritmo de actividad para llegar al objetivo de fabricación de 141.000 vehículos anuales. Ahora, con esta perspectiva se pone en duda esa meta. En principio, la suspensión de un turno de producción es por una semana pero todo dependerá de la evolución de la cuestión sanitaria.
En lo que va del año, la Hilux es el segundo modelo más vendido del país, con un fuerte aumento de la demanda que genera que la demora en las concesionarias para la entrega de una unidad llegue a 8 meses. Esto se explica por dos motivos. Por un lado, hay sectores como el campo, la minería y el petrolero que dispararon las ventas de pickups de todas las marcas. Desde hace años, el modelo de la compañía japonesa es líder en ese segmento. Por otro, con las restricciones a las importaciones que aplica el Gobierno hay menor oferta de 0km, en especial Sport Utility Vehicle.
Los consumidores de estos modelos se están volcando a la compra de pickups con alto nivel de equipamiento para, principalmente, el uso urbano o recreativo. Otra ventaja es el precio. Mientras los pocos SUV importados que ingresan al país están castigados con los Impuestos Internos, que encarecen su valor, las pickups están exentas.
Aún con este “tack time” de 90 segundos – el tiempo entre el inicio de producción de una unidad y el inicio de la siguiente -, en las concesionarias creen que no será suficiente para recortar los plazos de entrega a niveles razonables para la demanda actual. En algunas agencias consultadas aseguran que tienen, al menos, cuatro compradores para cada Hilux que reciben desde la terminal.
fuente: https://www.mdzol.com